Las leyes que gobiernan el mundo material y espiritual son las mismas desde el principio de esta creación.
Un maestro espiritual debe comprender que no está creando nada nuevo ni enseñando nada que no haya sido explicado ni realizado.
A la vez, creo que un maestro espiritual puede tener un gran poder si comprende que es un mensajero que trae estos conocimientos y prácticas diseñados y explicados para los tiempos que le toca vivir, con la dispensación que corresponde a esta era y hacia sus estudiantes considerando su cultura y la civilización en que están inmersos.
Esto le permitirá expandir las enseñanzas porque estará en sintonía y sincronicidad con miles de personas que le rodeen y que experimenten sus sugerencias.
Sí, de esta manera se puede tener un maestro espiritual realmente poderoso, siempre y cuando, esté consciente que el poder está en la enseñanza y en su capacidad de servir mejor, y no en su personalidad. A diferencia de las jerarquías mundanas, la autoridad está dada por ser el mejor servidor y no por ser un mejor servido.
Es mi palabra.
Serval Dion-Fortune
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